«Una de las últimas películas de Burt Reynolds lo trajo de vuelta a sus papeles más icónicos, y fue de A24.»

La vida del icónico Burt Reynolds estuvo llena de altos y bajos que marcaron su carrera en Hollywood. Durante los años 70, se posicionó como uno de los actores más taquilleros con películas memorables como «Smokey and the Bandit», «Deliverance» y «The Longest Yard». Sin embargo, con el paso del tiempo, llegó la caída de su popularidad, provocando fracasos y divorcios. En su último papel, en «The Last Movie Star», Reynolds ofreció una actuación que reflejaba su vulnerabilidad, rindiendo tributo a su carrera y vida personal.

Estrenada un año antes de su muerte, «The Last Movie Star» se presenta como un homenaje y una crítica a la vida de un ex-estrella. Comparado con «Jo Jo Dancer: Your Life is Calling», el personaje de Reynolds, Vic Edwards, es un reflejo de su propia vida como ícono de Hollywood. No obstante, esta película muestra a un actor mayor reflexionando sobre sus errores mientras se embarca en una aventura cómica.

La trama de «The Last Movie Star» entrelaza clips de sus películas pasadas, mostrando la trayectoria exitosa de Reynolds, contrastada con el envejecido Vic, que enfrenta la soledad tras la muerte de su perro. La historia se desata cuando Vic, persuadido por su viejo amigo Sonny (Chevy Chase), decide asistir a un festival de cine en Nashville, a pesar de que fue engañado sobre la asistencia de grandes leyendas del cine.

A lo largo de su participación en el festival, Vic se comporta de manera autodestructiva, llegando a insultar a su audiencia mientras que el evento celebra sus obras pasadas. A pesar del ambiente hostil, conecta con Doug, un joven fanático, quien le recuerda el lado humano que a veces se pierde entre las luces del estrellato.

La película explora la vida personal de Reynolds, reflejando sus relaciones fallidas. Su amor verdadero, Claudia, es un eco de su juventud que lo lleva a reconocer los lazos perdidos. La interacción entre Vic y Lil, la hermana de Doug, es un guiño a la tutoría que Reynolds seguramente deseaba dar a las nuevas generaciones, evitando que repitan sus errores.

Uno de los momentos más conmovedores de «The Last Movie Star» es cuando Vic, enfrentando su mortalidad, recuerda a sus amigos y seres queridos que han partido. Este film se convierte no solo en un adiós al personaje, sino también a la persona detrás de la pantalla, mostrando que la fama no siempre trae con ella el amor.

Incluso en su estado de fragilidad, Reynolds logra hacer reír y emocionar a quienes lo admiraban. «The Last Movie Star» se puede rentar on-demand en Prime Video y es un excelente recordatorio de la grandeza de un actor que dejó su huella en el cine.

La obra se convierte en una introspección profunda sobre la vida y el legado de Reynolds, y a pesar de sus dificultades, nos deja una lección sobre la importancia de valorar lo que realmente importa en la vida.

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