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Las co-producciones internacionales de la televisión británica cayeron el año pasado, aumentando la preocupación por la crisis de financiamiento.

¡Alerta en la televisión británica! Las co-producciones internacionales bajaron el año pasado, desatando temores sobre una crisis de financiamiento.

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El panorama de la televisión británica está en un punto crítico. Según los últimos datos del British Film Institute (BFI), las producciones internacionales en el Reino Unido han caído drásticamente, lo que está generando preocupación en la industria. A pesar de que la inversión en el sector audiovisual ha aumentado en un 31% este último año, cuando profundizamos en las cifras, descubrimos que las co-producciones están pasando por una crisis seria.

El dato más preocupante en el informe del BFI es que el gasto en co-producciones se redujo a £19.6 millones el año pasado, una cifra que se aleja considerablemente de los £44.2 millones del 2023 y que representa casi un 60% de disminución respecto a los £48.3 millones de 2022. Este retroceso sugiere que el auge de colaboraciones entre cadenas británicas y plataformas de streaming de Estados Unidos ha llegado a su fin.

Las señales de alarma se encendieron cuando productores y cadenas británicas comenzaron a advertir que el dinero destinado a proyectos conjuntos, como la serie «The Day of the Jackal» de Sky/Peacock, estaba disminuyendo. Esto ha creado un «perfecto temporal», como lo describió la BBC, donde algunas producciones ya aprobadas enfrentan huecos significativos en su financiación.

Mientras el gasto en co-producciones sufre una caída libre, la inversión en programas nacionales también ha mostrado una tendencia a la baja, cayendo un 25% de £797.7 millones en 2023 a £598.2 millones el año pasado, el nivel más bajo desde 2020. Esta caída en el gasto refleja una posible falta de apoyo para la narración local y resalta un cambio preocupante en las prioridades de la industria.

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Los datos del BFI sugieren que el Reino Unido se está convirtiendo cada vez más en un centro de servicio para producciones de Hollywood, donde se aprovechan los beneficios fiscales y la mano de obra calificada. De hecho, el 82% del gasto en producciones televisivas de alta gama y el 87% en películas proviene de inversiones extranjeras.

A medida que este fenómeno continúa, los resultados para los programas británicos podrían ser menos favorables. La creciente dependencia de la inversión externa puede afectar la diversidad y autenticidad de las narrativas británicas en un futuro próximo, algo que los espectadores deben tener en cuenta.

En medio de esta agitación, «The Day of the Jackal» ha conseguido destacar, convirtiéndose en la serie dramática original más vista en Peacock después de 75 días de su lanzamiento. Esto muestra que, a pesar de los desafíos, todavía hay espacio para el éxito en el mundo de las co-producciones.

La industria británica enfrenta un dilema significativo: la necesidad de atraer más inversión local mientras se navega en un mar de incertidumbre financiera. Será interesante observar cómo se desarrollan las cosas en los próximos meses y si se encuentran soluciones para revitalizar las co-producciones británicas.

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