«Este slasher imaginativo de internet es mucho mejor de lo que debería ser.»

¿Listo para un buen susto? La película ‘Girl House’, dirigida por Trevor Matthews y escrita por Nick Gordon, no solo entrega un festín de sangre y tensión, sino que también da de qué hablar sobre temas sociales pesados como la cultura de internet y la sexualidad femenina. Esto la convierte en una slasher bastante interesante que, a pesar de los clichés, ofrece una profundidad inesperada que atrapará a cualquier aficionado del género.

La trama se centra en Kylie, interpretada por Ali Cobrin, quien se une a una plataforma de streaming porno llamada Girl House, donde varias chicas viven juntas mientras transmiten en vivo sus actividades y realizan shows. Sin embargo, el problema aparece cuando un obsesivo y perturbado fanático, apodado Loverboy, empieza a acosarla y pronto la situación se torna de terrorífico a mortal.

‘Girl House’ no es solo una película de terror; es un comentario inquietante sobre el derecho a la privacidad en la era digital. Las jóvenes están constantemente vigiladas, un tema que, tras una década desde su estreno, resuena aún más con el auge de la cultura de las redes sociales. Este aspecto añade una capa de terror psicológico al caos slasher que se desarrolla.

La cinematografía de la película destaca el estilo visceral de los filmes de terror de los años 70, con efectos especiales que se esfuerzan por ser impactantes y auténticos. Las escenas de muertes son creativas, usando todo tipo de armas desde hachas hasta martillos. Cada brutalidad está diseñada no solo para impactar, sino también para provocar una respuesta visceral en la audiencia.

Más allá de las obvias escenas de gore, lo realmente inquietante de ‘Girl House’ es su exploración de la mentalidad de los peligrosos y desadaptados. Aunque la película se abre con una cita escalofriante de Ted Bundy sobre la pornografía y la violencia, no ofrece una respuesta sencilla, sino que nos hace reflexionar sobre la toxicidad de la «cultura incel» y la peligrosa percepción de derechos sobre los cuerpos de las mujeres.

De forma efectiva, traslada las ansiedades modernas sobre la privacidad y el acoso, presentando hombres que en la superficie parecen inofensivos pero que, al igual que Loverboy, esconden intenciones oscuras. Así, ‘Girl House’ nos da una mirada helada a un tema que podría ser simplemente lenguaje de horror, pero que en realidad, es una problemática actual.

La película, aunque criticada en su lanzamiento, se ha ganado un lugar especial entre los verdaderos entusiastas del horror, principalmente por su habilidad para destilar el miedo del abuso digital. Su insistente vigilancia produce inquietud, un recordatorio persistente de lo vulnerables que somos en un mundo donde todo es transmitido en tiempo real y donde la privacidad parece ser un concepto en extinción.

Así que si buscas una experiencia de miedo que también haga que medites un poco, ¡dale un vistazo a ‘Girl House’! Se encuentra disponible para streaming en Pluto, ideal para una noche de cine de terror que no solo asusta, sino que también invita a la reflexión.

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