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CINE

«Actriz de ‘La Semilla del Higo Sagrado’, Soheila Golestani, impedida de salir de Irán para ser parte del jurado en Róterdam»

Soheila Golestani, la actriz de ‘La Semilla del Higo Sagrado’, no puede salir de Irán para unirse al jurado en Róterdam.

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La cineasta y actriz iraní Soheila Golestani, conocida por su participación en «The Seed of the Sacred Fig», se encuentra en una situación complicada. Ella fue seleccionada para formar parte del jurado de la Competencia Tiger en el Festival Internacional de Cine de Róterdam, pero las autoridades de Irán le han prohibido salir del país. Este hecho ha suscitado preocupación ya que, según informes, a Golestani se le están imputando acusaciones de propaganda en contra del régimen iraní y promoción de la inmoralidad, algo que ella niega rotundamente.

En «The Seed of the Sacred Fig», la actriz juega un papel importante en un filme que ha llamado la atención en el festival. La película, dirigida por Mohammad Rasoulof y que fue nominada al Oscar, ha sido exhibida dentro de la sección Limelight del evento. La trama de la película está inspirada en las protestas por la libertad de las mujeres en Irán, explorando cómo una familia conservadora se ve afectada por los movimientos pro-derechos y democracia.

Aunque Golestani no pudo asistir al festival, su ausencia fue simbolizada por el director Rasoulof, quien mostró en la alfombra roja imágenes de ella y del actor principal, Missagh Zare. Este gesto fue una forma de resaltar los sacrificios que muchos artistas hacen bajo un régimen opresor.

Los cargos en su contra fueron presentados en un tribunal, pero hasta ahora no se ha emitido un veredicto. Esta situación añade presión sobre la comunidad artística en Irán, que a menudo enfrenta retribuciones severas simplemente por expresarse.

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El director de «The Seed of the Sacred Fig», Mohammad Rasoulof, también ha enfrentado problemas con las autoridades iraníes. Después de huir del país, enfrenta una condena de ocho años de prisión de la que ha tratado de escapar. En el festival, además de presentar su película, está planeando participar en un panel titulado «Cine y el Auge del Autoritarismo».

La película, que tuvo su estreno en el Festival de Cine de Cannes donde ganó el Premio del Jurado Especial, ha cobrado vida a través de la experiencia de su director, quien se vio obligado a filmarla en secreto. Esto resalta la valentía y el compromiso de los cineastas y actores iraníes en medio de la represión.

En resumen, la historia de Soheila Golestani y su ineludible conexión con «The Seed of the Sacred Fig» refleja la fortaleza de quienes luchan por la libertad de expresión en un contexto amenazador. La industria del cine en Irán se encuentra bajo un constante ataque, donde cada filme y cada artista enfrenta no solo el escrutinio, sino la posibilidad de severas consecuencias personales.

El caso de Golestani es un recordatorio de la importancia de proteger el arte y la voz de los creadores, especialmente en tiempos de crisis.

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