CINE
Naomi Watts dice que el director de ‘Mulholland Drive’, David Lynch, «me puso en el mapa».
Naomi Watts revela cómo David Lynch la catapultó a la fama con ‘Mulholland Drive’.

Naomi Watts, la talentosa actriz de «Mulholland Drive», expresó su profundo dolor en Instagram tras la muerte del cineasta David Lynch, a quien consideraba un gran mentor. Ella escribió: “Mi corazón está roto. Mi querido Dave…”. Watts destacó que el mundo nunca será igual sin él y que su influencia creativa fue sumamente poderosa.
Watts, que tuvo un papel destacado en «Mulholland Drive» de 2001, mencionó que gracias a Lynch, su carrera dio un giro radical después de años luchando por abrirse camino en el competitivo mundo del cine. Esta película, que comenzó como un piloto para televisión, se transformó en una obra maestra nominada al Oscar, marcando un hito en su trayectoria profesional.
La actriz británica, conocida por sus versatilidad, interpretó los roles de Betty Elms y Diane Selwyn, compartiendo pantalla con actores como Laura Harring y Justin Theroux. Su interpretación le abrió las puertas a otras grandes oportunidades, incluyendo dos nominaciones al Oscar por «21 Grams» y «The Impossible».
Laura Harring, coestrella de Watts, también rindió homenaje a Lynch, reflexionando sobre cómo su visión única y su generosidad artística impactaron en su vida y carrera. Ella recordó momentos especiales con él, describiéndolo como un «hombre curioso» que tenía la capacidad de ver más allá de las apariencias.
A lo largo de su carrera, Naomi ha tenido una serie de papeles memorables en películas como «King Kong», «Birdman» y «The Divergent Series: Insurgent». Más recientemente, fue nominada a un Emmy por su interpretación en «Feud: Capote vs. The Swans».
Cabe recordar que «Mulholland Drive» no solo fue un éxito crítico, sino que también le valió a Lynch el premio a Mejor Director en el Festival de Cannes en 2001. Este reconocimiento cimentó su estatus como uno de los directores más influyentes de su generación.
El legado de David Lynch perdura en la historia del cine, inspirando a nuevas generaciones de cineastas. Su estilo distintivo y su narrativa única han dejado una huella indeleble. Watts concluyó su homenaje expresando su gratitud por la amistad que compartieron, enfatizando que aunque esté devastada por su partida, siempre le estará agradecida.
Por su parte, tanto Watts como Harring destacan que Lynch no solo revolucionó el cine, sino que también llenó la vida de sus actores y colaboradores de amor, humor y un sentido renovado de autoconfianza. La memoria de Lynch vivirá a través de sus películas y el impacto que tuvo en cada uno de los que trabajaron con él.