«Jane Seymour aloja a su compañero de ‘Dr. Quinn, Medicine Woman’, Joe Lando, durante los incendios en L.A.»

Una historia conmovedora ha salido a la luz en medio de la devastación provocada por los incendios en Palisades. Jane Seymour, famosa por su papel en la serie de los 90 «Dr. Quinn, Medicine Woman», ha vuelto a demostrar su grandeza al abrir las puertas de su hogar a su antiguo compañero de reparto, Joe Lando, quien perdió su casa a causa de las llamas. La solidaridad en tiempos difíciles siempre resuena fuerte y esta situación es un claro ejemplo de ello.

Lando compartió su agradecimiento en Instagram, destacando la importancia de tener a alguien tan generoso como Seymour en su vida durante un momento tan desafiante. “Gracias a Dios hay ángeles en este mundo”, expresó, resaltando cómo Jane les ofreció un refugio sin dudarlo. Juntos, compartieron un vínculo muy especial durante los años que trabajaron en CBS, una conexión que ha perdurado hasta hoy.

La amistad entre Seymour y Lando, que comenzó en «Dr. Quinn, Medicine Woman» (1993-1998), ha continuado después de la serie con varias películas para televisión que los unieron nuevamente. En tiempos de crisis, la lealtad y el apoyo entre amigos se vuelve aún más evidente, y esta situación no es la excepción.

Seymour, en su propia declaración, mencionó los valores que su madre le inculcó: ayudar a otros en momentos de dificultad. “Recibir a Joe y su familia en nuestro hogar es lo que haces por la familia”, dijo, haciendo evidente que para ella, la relación que construyeron fue mucho más que una simple amistad.

En su momento de vulnerabilidad, Lando compartió la experiencia devastadora de perder no solo su hogar, sino también los recuerdos que se construyeron en él. A pesar de que su hogar no era lujoso, comenta que representaba su espacio familiar, donde vivió momentos importantes con sus hijos.

Lando recordó cómo caminaba a su casa cuando llevaba a sus hijos a la escuela y cómo la comunidad estaba llena de personas trabajadoras que han vivido ahí por generaciones. La devastación impactó no solo a él, sino a muchos en su vecindario, lo que destacó el verdadero espíritu de comunidad que se siente en estas situaciones difíciles.

La magnitud de los incendios ha creado un efecto dominó en la comunidad, y con ello, muchas familias se han visto obligadas a buscar nuevos comienzos. Como Lando declaró: «Este fuego es maligno», y no es para menos, ya que estar en medio de una tragedia así es un golpe desgarrador que cambia vidas para siempre.

El apoyo que Seymour brindó a su amigo no solo es un acto de generosidad, sino que también nos recuerda la importancia de la empatía y de estar ahí para nuestros seres queridos, especialmente en situaciones trágicas como esta. La comunidad y la amistad juegan papeles cruciales y son fundamentales para superar los momentos más oscuros.

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